Cuando creía dirigir el museo, solía repetir ante la
prensa, y hasta la saciedad, eso de “la ciencia es divertida”. Y no es verdad. Divertido
es el museo. Y su misión hacer CON la ciencia un espectáculo continuado. Allá
en Miramón se puede pasar una tarde muy agradable, porque todo está pensado
para amenizar al visitante. Pero convendría dejar claro que la ciencia, como
cualquier otra forma de conocimiento, no es divertida ni es tal y como se
presenta en Miramón. Usted allí no puede medir, repetidamente, las variables de
un experimento. Los fenómenos no se observan nunca en módulos tan
atractivamente diseñados. Tampoco podrá ver allí los miles de cables que
pueblan un laboratorio habitual. Créame. La ciencia, la de verdad, no es
divertida. Ni tiene razón alguna para serlo. La ciencia es rutinaria. Exigente.
Sacrificada. Y apasionante. E interesante. Y profunda. Y cautivadora.
Ciencia significa conocimiento. Conocimiento del mundo
tangible. Algunos dicen que la ciencia no es sino un método y el cuerpo de
técnicas que permiten conocer hechos de manera reproducible y falsable. Esto significa
que cualquier conocimiento científico ha de estar sujeto a continuos y
repetidos intentos de demostrar su falsedad. En ese camino, por contradictorio
que parezca, se encuentra también la grandeza de su enorme desarrollo. Pero vivimos
la era de las comidas divertidas, en vez de nutritivas. Y de la educación permisiva,
en vez de exigente. No es de extrañar que, también para hablar de ciencia, haya
que insistir tanto en la amenidad en lugar del esfuerzo y la constancia.
La ciencia está construida con el sacrificio y la
dedicación de muchos investigadores que anhelaron profundamente conocer más y
mejor las cosas. Los que nos dedicamos ahora a gestionar proyectos científicos
que cuestan cifras de muchos dígitos, no podemos sino sentir un nostálgico
escalofrío cuando observamos la felicidad de quienes dedican sus días a
enclaustrarse en un laboratorio y pasar en él mucho tiempo buscando un dato que
refute una teoría, o en su defecto la confirme. ¿Se encuentran divertidos?
Mucho. Pero se trata de una actitud. No de un solazamiento.
Por favor. Disfruten mucho esta Semana de la Ciencia. Es
Ciencia. Y Cultura. Y Conocimiento. No dejen de aprovechar la oportunidad para
verlo todo. Yo, por ejemplo, no pienso perderme las conferencias y stands de la
UPV/EHU en el edificio de Tabacalera.